A lo largo de estos 9 días nos ligaremos con las conciencias más elevadas y puras del Mundo Espiritual para que nos transmitan las enseñanzas que los Ángeles de Di-s transmiten en la Academia Celestial. Y que por su intermedio conozcamos las grandes verdades del mundo espiritual, para poder habitar en nuestro mundo, seguros y en Paz.
Abriremos las puertas del Alma Divina para que Nuevos Ángeles de Di-s participen de nuestra vida y hagan en ella las enmiendas necesarias para poder experimentar el regocijo y la plenitud.
Los mayores milagros que uno puede necesitar se pueden hallar en estos días porque compartiremos la mesa del verdadero saber con los mayores maestros de la humanidad: Abraham, Isaac, Jacob, Moshe, Aharon, Iosef, David, Salomón y muchos profetas más.
Durante este curso se conjugará el conocimiento de la Kabbalah, la Torá escrita y oral,
junto a la reflexión y la meditación
(se activaran 8 secuencias diferentes de Nuevos Ángeles)
que nos ayudarán en el Nuevo Año que comienza.
Información de interés
para quienes deseen mejorar su Vida.
Todo en la vida es Causa y Consecuencia, dado que para que algo pueda existir en nuestro mundo,
debe haber una causa que lo genere. ¿Recuerdas el momento de tu nacimiento? Con seguridad no
lo recuerdas ¿Por qué? Porque aún no hemos desarrollado la consciencia que es lo que te hace
recordar, esto sucede unos años después. Entonces, ¿para qué te hago una pregunta que no tiene
una respuesta? Tonto verdad, NO. Lo hice para explicarte algo muy importante en la vida de todas
las personas ¿Sabes de dónde vienen los momentos fortuitos y todos los infortunios que se
presentan en la vida? Seguramente responderás son cosas del destino, y esto no es cierto, el
destino de todas las personas es bueno siempre, el problema radica en el predestino (el camino
que nosotros tomamos para llevar adelante nuestro destino) porque el destino se sella a la hora y
día que se nace y no se puede modificar). Lo que sí se puede hacer, es modificar el camino que
elegimos para ejecutarlo, a esto se lo llama pre-destino. De acuerdo a la creencia que tiene una
persona (no me refiero a lo religioso, sino a todo concepto que aceptamos como verdadero) las
personas van desarrollando sus pensamientos y sentimientos, en base a estos dos factores
reaccionamos ante el entorno, generando situaciones agradables o desagradables. De acuerdo al
modo en que nosotros nos vamos relacionando en el medio ambiento en el que vivimos,
empezamos a manifestar nuestro destino o a bloquearlo. Cuando una persona impide que su
destino se manifieste, tomando un camino que no es el correcto, la fuerza del destino te ataca
generando infortunios, dificultades u obstáculos que no son producto del destino, sino que son los
resultados del camino por el que vas transitando la vida, que impide al destino poder manifestarse.
Del mismo modo que no recuerdas el momento de tu nacimiento, porque no hace falta que seas
consciente para que la fuerza que te impulsa a este mundo se active, dado que es una fuerza
externa a la tuya, existen fuerzas o energías que se activan externamente para permitir al destino,
poder manifestarse en este mundo. Esas energías externas te afectarán desfavorablemente, si el
pre-destino que tú vas trazando impide al destino poder manifestarse; en cambio si tu pre-destino
lo permite, esa energía te afectará favorablemente generando momentos fortuitos. El momento del
nacimiento de cada persona está escrito, es por esto que los médicos por más estudios que hagan
no pueden determinar el momento exacto del nacimiento, dado que nadie puede saber el día, ni la
hora exacta en que se va morir, tampoco puede saber con exactitud el momento en que va a nacer.
Y esto se debe a que existen fuerzas o energías que se activan externamente para que estos
eventos ocurran, sin ninguna necesidad de que tú lo sepas. Una vez al año, sucede algo similar, se
activan fuerzas externas que determinan la calidad de vida que experimentaremos a lo largo del
año. Esas fuerzas son las que generarán las buenas o malas consecuencias a la que nos vamos a
enfrentar, y esto depende del pre-destino que vamos trazando. Del mismo modo que un bebe nace
un día y una hora específica, el destino de cada año, también tiene un día para nacer y
desarrollarse. Ese día se llama Rosh Hashaná (cabeza de año o año nuevo espiritual) dado que el
destino está en esa dimensión razón por la cual no lo podemos verlo de antemano. Ese Día es el 1°
Julio, día en que esa fuerza que genera el nacimiento de un nuevo ciclo de vida se manifestará y
los resultados que generarán dependerán de nuestro pre-destino, que no es otra cosa que los
rasgos de carácter que vamos desarrollando. Por tanto en este Día, tú puedes hacer nacer un año
más favorable para tu vida, si corriges tu rasgo de carácter y te vuelves más obediente ante la
Voluntad del Creador. Entonces, únete a nosotros y eleva en este Día, la ofrenda que el Creador
nos pide y lograrás tener un año mejor. ¿Por qué? Porque estarás corrigiendo un rasgo de carácter
(pre-destino) que te vuelve más humilde ante el Creador. No importa si crees o no, así funciona la
vida y su destino, date una oportunidad y compruébalo por ti mismo.
El 1° de Julio de cada año, es el Día del Juicio a todas las Almas. (no lo olvides)
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